INGLATERRA.- Tina Banks, de 44 años, es una mujer que habita en la ciudad inglesa de Brighton, y pasó por la situación más bochornosa de su historia, cuando acudió a una tienda de juguetes y le compró un perico de pelcuhe a su pequeña hija de once meses, lo que no imaginó es que el ave estaba en el mostrador equivocado, al ser un juguete dirigido a los adultos.
Banks, pensó que el parlachin diría las típicas palabras de todo perico, sin embargo, la realidad fue otra, situación por la que decidió devolverlo a la tienda. Cuando lo acercó a la carreola de su hija y ésta lo tomó en sus manos, el ave pronunció sus primeras palabras : ¿Que mé estás viendo pend**a? Te voy a arrancar la cabeza y te la voy a clavar en el cuello.
Al pedir explicaciones a los empleados, éstos le mencionaron que alguien había colocado el perico en un exhibidor que no le correspondía, además de asegurarle que en la envoltura se prevenía al comprador de que no era un juguete para niños.